Medio Ambiente

Estos días los ciudadanos de Sabadell ya pueden ver en la calle los nuevos contenedores de recogida de residuos. La sustitución ha comenzado por los 1.061 contenedores de orgánica, fracción que se prevé que estará cambiada por toda la ciudad a mediados de este mes. Seguidamente, la empresa concesionaria del servicio de limpieza y recogida de residuos, Servicios Medio Ambiente, SA (SMATSA), continuará por la sustitución de los contenedores de carga lateral en el siguiente orden: vidrio (915), rechazo (1.859), papel (936) y envases (930). Una vez terminada esta fase, se sustituirán los 459 contenedores de carga trasera. Se calcula que el próximo mes de marzo la totalidad de contenedores distribuidos por toda la ciudad (6.160) estén instalados.

Tal y como ha comentado el alcalde de Sabadell, Joan Carles Sánchez, en la presentación: "Hoy es un día simbólico para que sustituimos uno de los elementos de movilidad urbana que tiene más impacto: los contenedores. Lo hacemos dando un salto cualitativo de estética y de funcionalidad y, además, damos respuesta a una petición ciudadana histórica que es la reducción del ruido de recogida con los nuevos camiones".

Por su parte, el teniente de alcalde de Presidencia y concejal de Smart Cities, Josep Ayuso, ha destacado que "los nuevos contenedores introducen elementos de control de la información y aportan datos que permiten aumentar la eficiencia y eficacia del servicio de recogida".

Finalmente, Eugenio Díaz, director general de SMATSA, destacó que "hoy es una fecha muy importante dentro del plan de renovación de las flota de recogida viaria y también con la incorporación de los contenedores. Con los nuevos vehículos hemos completado la renovación del 70% de la flota".

Con la renovación de la flota de contenedores todas las fracciones se recogerán con contenedores de carga lateral. En aquellos puntos donde las aceras o calzadas no lo permitan se colocarán de carga trasera (como hasta ahora). Hasta la fecha los contenedores de vidrio aún son de iglú y los de orgánica, de carga trasera.

Los nuevos contenedores, por tanto, ofrecerán un mejor servicio al usuario, ya que son más fáciles de utilizar e incorporan una serie de mejoras ergonómicas, como por ejemplo en el caso de los contenedores de rechazo disponen de un mecanismo de cierre la tapa con retraso.

Por otra parte, el hecho de plástico y con una abertura de vaciado posterior más grande, permite vaciarlos sin sacudir y, por tanto, hacer menos ruido en la operación de vaciado. Todos los contenedores irán con indicadores para invidentes.

Exceptuando la fracción resto, los otros contenedores irán con buzón, lo que evitará los problemas con los pedales de apertura y reducirá los impropios y voluminosos, que deberían ir a los centros de recogida.

En cuanto a los contenedores de rechazo, la base de la tapa sólo se encuentra a 1.200 mm de tierra, lo que posibilita que las personas con movilidad reducida puedan hacer uso del contenedor. La accesibilidad del contenedor está certificada por la Fundación Vía Libre (Fundosa).

Del mismo modo, todos los nuevos contenedores irán equipados con un elemento TAG (sensores por radiofrecuencia), que permitirá saber si un contenedor se ha vaciado o no y mantener actualizado en tiempo real el inventario de contenedores en la ciudad, no sólo numéricamente sino también gráficamente.

Nuevos camiones de recogida de residuos

El proyecto de renovación de la flota de vehículos adscritos a la recogida de residuos y la limpieza viaria de Sabadell incluye la adquisición de 20 recolectores FMO (Ros Roca sobre Chasis Renault), con caja de 25 m3. Las características de estos recolectores permitirán realizar la recogida de las cinco fracciones de residuos y de prácticamente todos los contenedores con el sistema de carga lateral, con el que se aspira alcanzar unos niveles de eficiencia y productividad que son difícilmente alcanzables con la recogida de carga trasera.

Entre las principales características del modelo FMO25 destaca su velocidad de trabajo. El diseño del grupo elevador, optimizado con la utilización de una solución específica de software, reduce hasta los 20 segundos el tiempo en que se completa el vaciado de un contenedor, lo que representa una mejora sustancial respecto a los actuales recolectores que tardan aproximadamente 35 segundos en realizar el ciclo completo de vaciado.

La relación de compactación de los recolector es regulable en función de los trabajos a realizar, lo que permitirá recoger todas las fracciones de residuos.

Los componentes mecánicos y la operativa de los trabajos hacen del FMO25 uno de los recolectores de menor consumo energético del mercado. Asimismo, cabe destacar la robustez de este equipo, ya que los 8 mm de espesor de la tolva protegen la chapa de la erosión provocada por los lixiviados.

Todos los componentes del FMO25 han diseñado para minimizar las emisiones sonoras, lo que lo convierten en uno de los recolectores más silenciosos del mercado porque la tolva está insonorizada con una capa de espuma flexible de melamina de 50 mm de grosor.

Por otra parte, el proyecto de inversiones prevé sustituir los actuales 24 recolectores de carga trasera por 8 nuevos vehículos. La disminución en el número de equipos se debe a que se otorgará un protagonismo mucho más destacado en la recogida con carga lateral. Se incorporará 1 recolector de 16 m3, 2 de 12 m3 y 5 de 5 m3.

Los equipos de 16 m3 y los de 12 m3, de la gama Olympus, son recolectores de carga trasera que ofrecen la mayor calidad y fiabilidad. Entre sus principales características destaca la polivalencia porque se pueden adaptar a contenedores de diferentes capacidades; la robustez; la velocidad de trabajo, dado que el ciclo de recogida se completa en sólo 18 segundos; el bajo nivel sonoro gracias a la insonorización con una capa de espuma flexible de melamina de 50 mm de espesor y la seguridad de los mecanismos de cierre automático, de los dispositivos de bloqueo y la puerta de acceso lateral para inspecciones, estribos de peso, diseño ergonómico ...

Los otros 5 recolectores-compactadores de 5 m3 para chasis de 3,5 toneladas proporcionarán una gran polivalencia al servicio de recogida de residuos y limpieza viaria, especialmente en aquellos barrios de la ciudad que disponen de una trama urbana caracterizada por calles estrechos.

El Rocarfort tiene una estructura resistente que impide la acumulación de residuos. Dispone de una prensa que proporciona una relación de compactación de 2:1 y que distribuye la basura uniformemente en el interior de la caja. La descarga de los residuos se puede hacer en recolectores más grandes, o bien directamente en la planta de tratamiento.

Este vehículo proporcionará una gran velocidad de trabajo ya que el ciclo completo de vaciado de un contenedor se realiza en sólo 14 segundos. Además, gracias al elevado ángulo de caída (141º) no será necesario sacudir los contenedores a la hora de vaciarlos, con lo que se evitarán ruidos y vibraciones.

La apuesta por el chasis Renault

Una de las principales novedades de la renovación de los vehículos de recogida de residuos y limpieza viaria consiste en la apuesta que se hace por los chasis Renault. La decisión se justifica, en primer lugar, por las mayores garantías de seguridad que ofrecen estos chasis gracias al hecho de disponer de barras estabilizadoras -que mejoran el equilibrio del vehículo en revolts- y, sobre todo, del sistema antivuelco ESC (Electronic Stability Control), que en situaciones de riesgo actúa frenando individualmente las ruedas para evitar sobrevirges y subvirages.

En segundo lugar, conviene destacar que los nuevos chasis cumplen la exigente Norma Euro VI, que regula los umbrales máximos permitidos de las emisiones contaminantes sólidas y gaseosas generadas por la combustión de los motores.

De esta manera, una vez completada la implantación de la nueva flota, Sabadell se convertirá en la primera ciudad que dispondrá de una flota de vehículos de recogida de residuos y limpieza viaria totalmente adaptada a los estándares establecidos Norma Euro VI, que regula las emisiones de NOx (Óxidos de Nitrógeno). Actualmente, estos servicios generan cerca de 10 toneladas anuales de NOx. La entrada en funcionamiento de los nuevos vehículos permitirá rebajar este valor hasta menos de 1 tonelada, con lo cual se reducirá de una forma muy significativa la huella ecológica de la recogida de residuos y la limpieza viaria de la ciudad.