Los orines de perro en la calle son la problemática de limpieza que acumula más quejas entre la ciudadanía de El Prat, según se pudo comprobar con el proceso de participación sobre residuos y limpieza.
En la lucha contra esta realidad, el Ayuntamiento ha iniciado una prueba piloto que consiste en concentrar en un punto las micciones de los perros, evitando o reduciendo así las manchas en el pavimento, el mobiliario urbano y en las fachadas. Los orines, aparte de las molestias como los malos olores, también deterioran fuerza los materiales.
Principio de acondicionamiento positivo
El tótem, que funciona de manera autónoma con placas solares, es una especie de urinario adiestrador, basado en el principio científico del condicionamiento positivo: el fin de atraer a los perros, cuando el animal hace una micción recibe un premio en forma de golosina ofrecida por un dispensador. De este modo, el animal querrá repetir la experiencia cuando tenga que orinar de nuevo. Se espera que el tótem concentre una media de 500 visitas por mes.
Este sistema se ha instalado en la plaza del Lago de San Mauricio y, en función de su utilidad, se extenderá a otros puntos de la ciudad.
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