La implantación progresiva de contenedores inteligentes y el mantenimiento del puerta a puerta permiten reducir en 4.000 toneladas la fracción resto y acercar a la ciudad a los objetivos europeos de reciclaje
La recogida selectiva de residuos en toda la ciudad de Girona ha vuelto a crecer tras varios años de estancamiento gracias al cambio de modelo implantado progresivamente desde el otoño de 2024. Con datos acumulados hasta septiembre de 2025, la previsión municipal sitúa la tasa de recogida selectiva al menos en el 58%, una mejora significativa respecto al 50,74% registrado en 2024 y un avance hacia las nuevas directrices estatales y europeas, que marcan alcanzar el 70% de recogida selectiva para lograr un 60% de reciclaje global en 2030.
El concejal de Acción Climática, Sergi Cot i Cantalosella, ha valorado positivamente la evolución de los datos y ha señalado que “tras meses de implementación del nuevo sistema, con la complejidad que comporta, empezamos a tener cifras positivas que apuntan en la buena dirección”. No obstante, ha advertido de que el incivismo sigue teniendo un impacto negativo, tanto en el resultado final como en el coste que asume el Ayuntamiento por el tratamiento de los residuos.
El incremento de la recogida selectiva se ha concentrado especialmente en los contenedores laterales, donde se ha pasado de recoger un 41,10% en 2024 a un 45,20% en 2025. En este grupo se incluyen los contenedores inteligentes, que se abren con tarjeta electrónica y que actualmente disponen de un contenedor marrón para la fracción orgánica y otro gris de multifracción para depositar, según el día, cartón, envases o resto.
El incremento de la recogida selectiva se ha concentrado especialmente en los contenedores laterales, donde se ha pasado de recoger un 41,10% en 2024 a un 45,20% en 2025.
En cuanto al puerta a puerta, la media se mantiene en valores muy elevados y consolida su eficacia: ha pasado del 91,12% al 91,76% en 2025. La recogida comercial también ha experimentado una ligera mejora, subiendo del 66,52% al 66,64%.
El Ayuntamiento ha introducido ajustes en el modelo en función del comportamiento detectado en algunas fracciones. Inicialmente, los contenedores inteligentes incluían también el vidrio, pero esta opción se modificó el pasado mes de junio tras detectar un aumento de residuos impropios que dificultaban su correcta recuperación y reciclaje. Como medida correctora, se recuperaron los contenedores de vidrio abiertos en tres de cada cuatro áreas de contenedores inteligentes, con el objetivo de mejorar los índices de reciclaje de esta fracción.
El aumento de la recogida selectiva ha tenido un efecto directo sobre la fracción resto. Según los datos municipales, se han dejado de enviar 4.000 toneladas de residuos a esta fracción, sumando tanto los residuos depositados dentro de los contenedores como los que se dejaban fuera.
Este cambio de tendencia se ha producido principalmente a partir del otoño de 2024, coincidiendo con la implantación progresiva del nuevo sistema de contenedores inteligentes en 20 barrios de la ciudad. El Ayuntamiento prevé que la cifra siga mejorando con el nuevo modelo que se desplegará a principios del próximo año, que incorporará un contenedor para cada fracción, accesible todos los días y a cualquier hora mediante tarjeta. Esta medida busca reducir prácticas incívicas como el depósito de residuos en fracciones incorrectas o fuera de los contenedores, conductas que han mejorado en orgánica, envases y vidrio, pero que han aumentado en el caso de la ropa, especialmente cuando acaba en la fracción orgánica.
En términos de participación, el 78% de las personas usuarias del puerta a puerta hacen un uso habitual del sistema. En el caso de los contenedores inteligentes, se registran aproximadamente 1.750.000 aperturas por trimestre, un dato que refleja el grado de implantación del modelo y su utilización continuada por parte de la ciudadanía.
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