Medio Ambiente

La Generalitat Valenciana ha ratificado su apuesta por el reciclaje de residuos orgánicos con la compra de 226 compostadores de biorresiduos para fomentar el compostaje doméstico y comunitario entre los consorcios y entidades locales, que ha supuesto una inversión de 16.140,94 euros. 

Se trata de una medida de prevención en la generación de residuos, mediante la cual se puede realizar autocompostaje, con el fin de reducir la cantidad de residuos orgánicos que van a los contenedores RSU y que, posteriormente, son transportados a plantas de tratamiento. 

El objetivo final es reducir la generación de residuos y conseguir, de este modo, una disminución de las tasas de recogida y tratamiento de residuos para los ciudadanos que voluntariamente se adhieran a este sistema y lo realicen de forma adecuada. Esta medida está consagrada en los planes nacional y autonómico de residuos y está siendo incentivada desde la UE para su implantación paulatina en España.

Diversos consorcios de residuos y ayuntamientos de la Comunitat están colaborando con la Generalitat en la normalización y extensión de este sistema, que es apto, sobre todo, para zonas rurales y semiurbanas, aunque también para algunas ubicaciones de zonas urbanas. 

De hecho, este nuevo sistema promovido por la Generalitat va a ser una de las grandes líneas de trabajo de varios consorcios de residuos de la Comunitat, ya que se incluirán cursos de formación para los servicios técnicos municipales y para los usuarios finales, entre otros.

Algunos municipios de la Comunitat Valenciana ya están trabajando en la implementación de este sistema, una modalidad de gestión de residuos adicional y complementaria al servicio de recogida actual.