Urbanismo

El Campillo de la Virgen limita con el barrio de Ciutat Meridiana y con el parque natural de Collserola. Está dividido en dos espacios separados por un desnivel; el primero, en la cota de la calle de Vilatorta, da continuidad a la calle y acoge dos áreas de juego infantil. El segundo, constituido como un espacio amplio que acoge una pequeña pista de baloncesto y donde se suelen celebrar los actos de las fiestas mayores, es el que acogerá la nueva pista deportiva.

El espacio contará con una pista reglamentaria de fútbol sala de hormigón, adaptada para la práctica de deportes varios. El elemento más significativo será la estructura de la cubierta metálica. Los pilares, formados por tres perfiles metálicos curvados, recordaron la figura de árboles que mantienen unida la cubierta al terreno. Por su parte, la sinuosidad y ligereza de la cubierta evocan una especie de nube levantándose sobre la pista.

Las gradas prefabricadas se retirarán y se volverán a colocar paralelas a la pista, a dos metros de distancia. Una primera línea de gradas se situará allí donde el desnivel del talud es más pronunciado. La base de las gradas estará a la misma cota de la pista, por lo que serán totalmente accesibles. Una segunda fila se situará centrada respecto a la pista, lo reunirá más espectadores y suavizará la inclinación del talud verde.

La estructura de la cubierta incorporará unas protecciones de nylon, situada a partir de 3 metros de altura, para evitar que las pelotas se alejen de la pista de juego. Las protecciones bajas alejarán hasta el perímetro del Campillo, con la voluntad de evitar crear espacios cerrados y la sensación de jaula.

Esta intervención también incluye la colocación de tres nuevos vestuarios, dos de ellos con duchas y servicio higiénico, y un tercero adaptado. También contará con un espacio de almacén independiente. Los nuevos vestuarios se ubicarán en el espacio entre los módulos existentes, bajo el porche, y con acceso directo desde el exterior.

La urbanización de los espacios se completará con la adecuación de la rampa, lo alargará su recorrido para hacerse accesible y dar cobertura a toda la pista. En el otro extremo se dispondrá una rampa-escalera para normalizar un recorrido que ahora se realiza a través de un solar de arena. Por el lado este, donde el bosque baja en pendiente hasta la carretera, se ubicará una pequeña duna de vegetación que alejará la valla del límite pisable.

Las obras contamos con un presupuesto total de 1.660.200 euros y se prevé que las actuaciones finalicen a lo largo de la primavera de 2021.