Medio Ambiente

Entre los días 13 y 19 de abril se recogieron en las playas de Montgat, Badalona y Sant Adrià de Besòs un total de 126 toneladas de residuos, materia orgánica mayoritariamente. Estos residuos son consecuencia del temporal que los días 11 y 12 de abril afectó el litoral con fuerte oleaje y una subida del mar debido a las bajas presiones y las lluvias intensas en la cuenca del Besòs. 

Una gran fracción de los residuos que se recogieron son restos de caña (Arundo donax), una especie de origen incierto debido a su uso ancestral por parte del hombre. La caña es una de las gramíneas más grandes del mundo y muy extendida en las cuencas de los ríos que desembocan en las playas metropolitanas. Su gran adaptación a las cuencas mediterráneas y el elevado poder de extensión y reproducción por rizoma, la convierten en una de las principales especies colonizadoras de los espacios húmedos. 

Con las avenidas, las cañas viejas se rompen y son arrastradas por la fuerza del agua, que junto con los otros materiales pueden taponar puentes, reducir la capacidad de desagüe, provocar desbordamientos o bien llegar de forma masiva a las playas, como es el caso de este último temporal. 

Los equipos del servicio de limpieza de playas de la AMB trabajaron los días posteriores al temporal de manera continuada. Se utilizó un tractor con una herramienta especial para retirar cañas, otros tractores con cribadoras y también haciendo trabajo manual, siempre imprescindible. 

Para hacer un una gestión más sostenible de los residuos, la AMB creó un protocolo para separar manualmente la fracción de origen antrópico (plásticos, neumáticos, celulosa, etc.) de los restos vegetales, y hacer una gestión diferenciada. Los restos vegetales obtenidas se llevan a una planta de compostaje. Se calcula que se han valorizado un total de 59 toneladas de restos vegetales que no se han tenido que llevar al vertedero.