Urbanismo

De frontera entre barrios a un nuevo gran centro vecinal en el distrito de Sants-Montjuïc. La propuesta Campus Magòria: Conecta 4 ha sido el proyecto ganador del concurso de ideas que debe convertir el recinto de la antigua estación ferroviaria en un nuevo foco de vida vecinal, zona verde y de equipamientos deportivos y sociosanitarios, al tiempo que derribará la frontera entre los barrios de la Bordeta, Hostafrancs y la Fuente de la Codorniz.

La propuesta ganadora, a cargo de los arquitectos Ana Gutiérrez Merín y Álvaro Cuéllar Jaramillo (Under Project Lab), Elisenda Fontova Guri y Enric Escriba Navidad, con Sociedad Orgánica como colaboradores, ha destacado entre las ocho presentadas el encaje en el entorno y la accesibilidad e itinerarios de conexión por el interior de todo el espacio de Magòria.

En este sentido, la transformación de Magòria supondrá la permeabilización de todo el ámbito, conectando la calle de Corral con la Gran Vía de las Cortes Catalanas a través de diferentes pasajes y de la apertura de la fachada de la calle de Moianès a una gran zona verde de más de 5.000 metros cuadrados.

La Magòria del futuro se articulará en torno al campo de fútbol, ​​que lejos de convertirse en una barrera entre los diferentes espacios y equipamientos, dispondrá de una anilla-pasarela para conectarlos. Así, en el triángulo que forman las calles de Corral y de Moianès será donde se concentrará la zona verde en una sola pieza que se alargará hasta el centro cívico de la antigua estación, en la Gran Vía. El campo de fútbol once ubicará sobre la fachada de la calle Corral hasta la altura de la calle Tort, una calle que ganará continuidad a través de Magòria entre el campo de fútbol y el nuevo pabellón polideportivo y se convertirá en un nuevo eje peatonal que conectará la Bordeta y la Gran Vía.

Sobre la línea de la Gran Vía de las Cortes Catalanas, entre el alargamiento de la calle de Tort y el casal cívico de Magòria levantará el edificio de 150 viviendas dotacionales y de alquiler, un edificio previsto con diferentes alturas para generar una gran terraza sobre el parque y el centro cívico de Magòria.

En cuanto al edificio destinado al equipamiento sociosanitario, se construirá un edificio en forma de L que por un lado abarcará el pabellón polideportivo y de la otra hará frente a un nuevo pasaje que unirá la Gran Vía con la calle del Corral. Con esta disposición se consigue la proximidad con el actual CAP de Magòria, que quedará complementado con el CUAP (Centro de Urgencias y de Atención Primaria), abierto las 24 horas, además del hospital sociosanitario con capacidad para 261 camas que ocupará este edificio.
 

Pol de equipamientos deportivos

Los espacios para la práctica del deporte ocuparán más de la mitad de todo Magòria, un 53% total del suelo. La recuperación del histórico campo de fútbol, ​​la construcción de un pabellón polideportivo y de un campo de fútbol 7, así como nuevas pistas de petanca es uno de los ejes de la transformación del recinto, con un impacto positivo para el sector asociativo del distrito de Sants-Montjuïc, concretamente los barrios de Sants, Hostafrancs, la Bordeta y la Fuente de la Codorniz. Las asociaciones y clubes deportivos que serán usuarias de estos equipamientos tienen un fuerte arraigo entre la población joven del distrito, ya que dinamizan más de 3.000 deportistas menores de 18 años. Entre estas entidades se encuentran organizaciones históricas de los barrios de Sants-Montjuïc como los equipos de fútbol de la UE Sants y la SE Mercado Nuevo Magòria, el CE Balonmano BCN Santos, el JAC Sants de baloncesto o el Club Petanca Santos, entre otros.

El campo de fútbol seguirá siendo uno de los rasgos característicos de Magòria, ocupando la centralidad, ahora pero alineado con la calle del Corral. El elemento que da singularidad al proyecto del campo es la solución arquitectónica para que este espacio sirva para articular y conectar los diferentes ámbitos y no se convierta en una nueva barrera: una anilla-pasarela perimetral que hará la función de accesibilidad, de gradas, de vestíbulo, de mirador y de pérgola, gracias al salto de cota entre la calle del Corral y la Gran Vía.

El campo, que estará al nivel de la Gran Vía, quedará hundido respecto a la calle del Corral, desde donde se podrá acceder a pie de calle a la pasarela perimetral del campo. En este lado longitudinal, paralelo a Corral y bajo la pasarela, se desplegarán las gradas, debajo de las cuales se ubicarán los vestuarios, salas técnicas y almacenes de material deportivo. Las gradas quedarán cubiertas por la pasarela, en el techo de la que se podrá instalar una red de placas fotovoltaicas para la generación de energía eléctrica.

La pasarela perimetral del campo de fútbol conectará con el pabellón polideportivo de cuatro plantas por su lado corto. La misma pasarela es la solución arquitectónica para potenciar la permeabilidad visual entre el campo de fútbol y las pistas deportivas del pabellón para la práctica de deportes como el baloncesto, el fútbol sala y balonmano. En la cubierta, además, se ubicará el campo de fútbol 7, lo que significa un aprovechamiento del espacio. La fachada del pabellón en la calle del Corral será vidriada o translúcida, de modo que el edificio tenga iluminación natural.

Al otro lado del campo de fútbol e integradas dentro de la gran zona verde, se ubicarán las dieciséis pistas de petanca previstas, una disciplina deportiva popular que contribuirá a dinamizar socialmente el espacio.

Pol de equipamientos sociosanitarios

En la nueva Magòria habrá un hospital sociosanitario con 261 camas para atender a pacientes crónicos, subagudos, de cuidados paliativos y de larga estancia, y adicciones crónicas.

También se pondrá en marcha un centro de urgencias y de atención primaria, que abrirá las 24 horas los 365 días el año.

Ambos equipamientos complementarán el CAP Bordeta-Magòria.

Vivienda dotacional y de alquiler asequible

El ámbito de la Magòria tendrá un edificio con 150 viviendas de alquiler a precio asequible para personas mayores o en situación de vulnerabilidad. Este espacio complementará la oferta de vivienda de Cant Batlló; en total sumarán 441 pisos públicos.

Más de 5.000 metros cuadrados de verde

La propuesta de Campus Magòria concibe la zona verde en un gran único espacio compacto para conseguir la máxima calidad del espacio. Se ubicará en el triángulo que forman las calles del Corral y del Moianès y se entiende como una continuidad de los actuales Jardines de Celestina Vigneaux, al otro lado de la calle del Corral, que se convertirá en el eje que a la vez conectará este gran espacio de verde con los futuros jardines de Can Batlló. Al mismo tiempo, por la parte baja del ámbito, la nueva zona verde de Magòria integrará alrededor del casal cívico, que verá reforzado la singularidad del edificio de la antigua estación como espacio simbólico e histórico del barrio .

En referencia a la vegetación, el objetivo es preservar el arbolado existente compatible con la nueva ordenación y se conservará el mayor número de ejemplares que se encuentren en todo el ámbito, estudiando la viabilidad de su trasplante en los espacios libres. Se garantizará también la biodiversidad del verde urbano, con variedad de especies mediterráneas tanto en el parque como la pasarela perimetral del campo de fútbol o en las cubiertas y fachadas de los edificios, con el objetivo de generar zonas de sombreado en verano y soleamiento en invierno.

La definición del proyecto de Campus Magòria: Conecta 4 se ha basado en los principios de eficiencia y eficacia, atendiendo a la consideración y cuantificación de los recursos que se deben utilizar para llevarlo a cabo. Es decir, la prioridad de la propuesta es la minimización del impacto ambiental. Se promoverá también el uso de equipos eficientes y de bajo consumo en todos los usos de la edificación, con ahorros que podrán llegar al 30% respecto a aparatos convencionales.

Para reducir el consumo de agua potable en los edificios dotacionales y deportivos, la propuesta prevé el reciclaje de aguas grises para inodoros, riego de la vegetación y limpieza. En cuanto al consumo de energía, los nuevos edificios se incorporarán medidas activas y pasivas para el ahorro y la autoproducción de energía procedente de fuentes renovables.

Calendario y tramitación

A partir del proyecto Campus Magòria: Conecta 4, el Ayuntamiento de Barcelona empieza ahora el proceso para elaborar un Plan de Mejora Urbana (PMU) para ordenar urbanísticamente la propuesta y definir volúmenes, alineaciones y usos de cada uno de los ámbitos donde se deberán construir los diferentes equipamientos. Este PMU de Magòria elaborará de la mano de los diferentes operadores públicos que deberán ejecutar la construcción y reurbanización del espacio, además del preceptivo proceso participativo con la ciudadanía como en todo proceso de transformación urbanística.

Dada la magnitud del proyecto, la previsión es que el PMU esté aprobado definitivamente durante el primer semestre de 2021. En este momento los diferentes operadores podrán empezar a trabajar en los proyectos para cada uno de los equipamientos sociosanitarios y deportivos, el edificio de vivienda y la zona verde, con la vista de poder empezar las obras a principios de 2023.

La inversión estimada para la transformación de todo Magòria rondará los 60 millones de euros entre el Ayuntamiento de Barcelona y la Generalitat de Cataluña, que asumirá la parte de los equipamientos sociosanitarios con una previsión estimada de entre 30 y 35 millones de euros .

La transformación de la zona ha sido posible después de que el año 2016 el Ayuntamiento de Barcelona adquiriera a la Generalidad de Cataluña este solar. El acuerdo ha permitido acelerar el cambio del barrio de la Bordeta iniciado el año 2011 con el proceso de transformación de la antigua fábrica de Can Batlló. Los terrenos de Magòria hacía muchos años que habían quedado sin uso y actuaban como una barrera entre el barrio de la Bordeta y la Gran Vía, un espacio que ya se ha empezado a recuperar después de que este otoño se inaugurara la zona verde del sector 2, en el ámbito que toca en Can Batlló. Con esta adquisición por parte del Ayuntamiento, el distrito de Sants-Montjuïc no sólo se dota de equipamientos sociales, sanitarios, deportivos y de vivienda, sino que permite que el barrio se abra a la Gran Vía y da continuidad a la trama urbana de la zona que quedaba interrumpida por los terrenos de la Magòria.