Movilidad

La Generalitat de Catalunya, el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) y el Ayuntamiento de Barcelona están satisfechos con la disposición del sistema de etiquetado ambiental que ha establecido la Dirección General de Tráfico (DGT). Estos distintivos servirán de base para ejecutar las políticas y las medidas que las diferentes administraciones, a escala local y autonómica, decidan en el marco de sus competencias en materia de calidad del aire. 

La misión de este sistema es discriminar positivamente los vehículos más respetuosos con el medio ambiente conformando un instrumento eficaz a la hora de gestionar, por ejemplo, los episodios de alta contaminación, o establecer zonas de bajas emisiones en los centros urbanos. Al realizar una clasificación de los vehículos en función de sus emisiones, el sistema, además, promueve aquellos propulsados por energías alternativas.

Una herramienta común

Las tres administraciones han trabajado conjuntamente con la DGT para definir los criterios de clasificación de coches y furgonetas, y para establecer como prueba piloto la emisión y el envío de las etiquetas a toda la demarcación de Barcelona. De este modo, el mes de marzo pasado se materializó la primera de las etiquetas adhesivas, la llamada “cero emisiones”, de color azul, y se envió a los 3.200 titulares de vehículos eléctricos del área metropolitana. Durante el mes de julio la recibieron los 9.700 titulares de los vehículos ECO, en este caso, de color azul y verde. Este mes culminará el proceso con la remisión de las identificadas como B –unas 500.000, de color amarillo– y C –unas 260.000, de color verde–. Los titulares de los vehículos más antiguos y contaminantes no recibirán distintivo ambiental.

Este conjunto de etiquetas representan el 50% del parque de vehículos más limpio de la conurbación de Barcelona según su incidencia en la contaminación local. Cada autoridad con competencias en fiscalidad del automóvil, movilidad y medio ambiente podrá decidir en cada momento qué incentivos ofrece a los vehículos menos contaminantes.

Voluntaria pero efectiva

A pesar de que la colocación de la pegatina es voluntaria, se recomienda hacerlo en la parte inferior derecha del vidrio del vehículo para permitir la visibilidad. Las administraciones con competencias en movilidad y medio ambiente, como es el caso del AMB, el Ayuntamiento de Barcelona y la Generalitat de Cataluña, podrán acceder en tiempo real al registro de vehículos de la DGT a través de la matrícula y conocer la clasificación ambiental y el tipo de etiqueta que corresponde a cada vehículo.

La conurbación de Barcelona debe mejorar la calidad del aire por lo que respecta al contaminante dióxido de nitrógeno (NO2) y continuar con las políticas de reducción de emisiones de partículas en suspensión. En el área metropolitana el transporte rodado constituye alrededor de la mitad de las emisiones de estos contaminantes. El porcentaje aumenta muy significativamente cuando se evalúan los núcleos urbanos.

Unidos contra la contaminación

Es por este motivo que las diferentes administraciones implicadas trabajan en el fomento del trasvase modal hacia sistemas más limpios y eficientes. Lo hacen, entre otros vías, a través de la Mesa de la Calidad del Aire de la Conurbación de Barcelona, impulsada por la Generalitat, un órgano donde trabajan conjuntamente todos los sectores, agentes sociales, instituciones y organismos públicos y privados implicados o interesados en la reducción de la contaminación del aire de esta área. La Generalitat bonifica los vehículos más limpios en los peajes de su titularidad, que son gratuitos para los coches eléctricos. Ahora está preparando el Decreto que excluirá de los descuentos los vehículos diésel, más contaminantes, y que incluirá las motos eléctricas en la gratuidad. También está evaluando la discriminación de los vehículos que pueden circular por los carriles bus-VAO que son competencia de esta administración.

Por su parte, el Ayuntamiento de Barcelona ha creado la Mesa contra la Contaminación del Aire para tener un espacio transversal que permita analizar la situación de la calidad del aire de la ciudad, proponer y desarrollar medidas correctoras, informar y sensibilizar, y hacer el seguimiento; así como analizar la actuación ante episodios de contaminación del aire.

El AMB ha creado el Consejo de Municipios en Lucha contra la contaminación atmosférica para elaborar una estrategia conjunta para mejorar la calidad del aire de la metrópolis. Es el encargado de acordar y coordinar medidas conjuntas con los 36 municipios metropolitanos, identificar necesidades comunes y posibles soluciones y potenciar, a la vez, programas y acciones de educación y sensibilización ciudadana. Entre las primeras medidas a desarrollar por este nuevo organismo destaca la creación de zonas de bajas emisiones.

“El etiquetado facilitará el establecimiento y la entrada en funcionamiento de las tres zonas de bajas emisiones propuestas por el AMB, donde se irá impidiendo de manera progresiva la circulación de estos vehículos más nocivos”, ha expuesto el Vicepresidente de Movilidad y Transporte del AMB, Antoni Poveda. “Así mismo, desde el AMB proponemos reorientar las ayudas hacia los propietarios de los vehículos más antiguos, especialmente hacia los de menores ingresos”, ha añadido Poveda.

Los tres organismos trabajan de forma coordinada y los grupos de trabajo se han organizado para que estén unificados y den una respuesta conjunta en este ámbito.